En 1984 un operario cortador de turba halló algo realmente sorprendente. En las cercanías del aeropuerto de Manchester se encontraba el enterramiento de un druida cuyo cadáver estaba intacto.
En el verano de 1984 Andy Mould trabajaba en una operación de recogida de turba en la ciénaga de Lindow Moss, y al ahondar en la tierra se encontró con una especie de “pelota de cuero”. Su sorpresa fue versal cuando al lavarla pudo comprobar que se trataba de una cabeza humana. Le faltaba una parte de la mandíbula, por lo demás estaba intacta. Al dar parte a la policía, pensaron por un momento que podía tratarse de una mujer desaparecida en la zona unos veinte años atrás. Pero al realizarle la prueba del caborno-14 se constató que la cabeza tenia alrededor de 2000 años.
Meses más tarde Andy Mould regresó para continuar trabajando en la zona y ya para colmo de la "causalidad" encontró el cuerpo, correspondiente a la cabeza, mucho mejor conservado. Datado con la misma prueba en 2000 años también de antigüedad. El llamado desde entonces Hombre de Lindow paso a manos del equipo de arqueólogos del Museo Británico.
La turbera donde fue descubierto, dicen los expertos, fue primordial para preservar durante dos milenios este cuerpo, que junto con su cabeza están en perfecto estado en el Museo Británico. De hecho, las "sustancias azucaradas de la turba actuaron como un curtidor", por lo que los tejidos se convirtieron en cuero.
La teoría que más parece convencer acerca de su muerte es que esta tuvo lugar por degollamiento ritual, realizado como parte de los ritos druídicos de la Edad del Hierro tardía, época a la que pertenece. Es conocido que el polen de muérdago formaba parte de estos ceremoniales y fue hallado en su estómago. En el torso tenia pigmentos de cobre igualmente relacionados con los antiguos sacerdotes celtas. Por los estudios a los que fue sometido, también se sabe que era un varón de 20 años de edad que gozaba de buena salud, probablemente de un estatus social alto, puesto que no mostraba huella alguna de haber realizado trabajos duros. Todo ello hace pensar a los arqueólogos que su muerte ha formado parte de un ritual relacionado con su rango de druida.
Imagen de -edad de niebla -