Para realizar cambios sociales tan deseados y tan importantes, además de los poderes públicos y la sociedad en general, los propios mayores son fundamentales dada la capacidad de las nuevas generaciones de este colectivo para ser agentes sociales, capaces de colaborar con el resto de agentes, en la construcción de una sociedad más justa, activa y solidaria.
El "Envejecimiento Activo" tiene como finalidad impulsar la participación entre las personas mayores, hemos aumentado la esperanza de vida y ya no basta con cumplir años, hay que cumplirlos sintiéndonos bien. Por tanto después de la jubilación a partir de los 65 años cada vez más hombres y mujeres se plantean emprender actividades diferentes de todo tipo, económicas, socio-culturales, artísticas, entre otras, que hacen de su vejez una etapa plena estando integrados en la sociedad y aportando su sabiduría y su experiencia.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el "Envejecimiento Activo" como el proceso que permite optimizar oportunidades en salud, participación y seguridad, para mejorar la calidad de vida a medida que las personas vamos envejeciendo. Es importante, por tanto, realizar ejercicio físico a diario aunque de carácter moderado, potenciar nuestro desarrollo cognitivo con nuevas actividades formativas e incluso retomando estudios y realizando todas aquellas cosas y/o proyectos que por falta de tiempo no se pudieron llevar a cabo. Por supuesto es fundamental una dieta saludable para cuidarse y para que el proceso de envejecer no sea ningún impedimento a la hora de disfrutar de esta nueva etapa y de las nuevas oportunidades que la vida nos presenta, así lo señala el Libro Blanco del Envejecimiento Activo.
Existen a nivel institucional diversos programas
que ponen especial énfasis en la necesidad de fomentar esta fórmula para envejecer activamente dentro del colectivo poblacional de mayores que cada año va en aumento.
Imágenes de - edad de niebla -